Hola amigos.
En un artículo anterior os hablaba de cuales eran, desde mi punto de vista, las herramientas esenciales para trabajar el huerto. Si a esas herramientas esenciales (azada y rastrillo), le añadimos algunas más, que en mi opinión también son muy importantes, tendremos el conjunto de herramientas básicas del horticultor, herramientas que no deberían faltarle a nadie.
Para mí, además de la azada y el rastrillo, son muy importantes las siguientes herramientas: cuerda y guías, ahoyador, escantillón, cubo y escarificador de mano.
La cuerda la uso, para en un primer momento, trazar los bancales (como podéis ver en el artículo que hice hace unos días), pero ya en lo que se refiere a los cultivos, para servir de guía a la hora de colocar plantas y semillas. La cuerda la engancho a unas guías que coloco en cada extremo del bancal. Esas guías, que en un futuro las haré mejor, las he hecho a partir de esquineras para yeso. He aprovechado los agujeros para en ellos sujetar las cuerdas. Tengo marcado los agujeros para que las líneas de cultivos vayan a distancias entre sí de 30 ó 40 cm.
Cuerda |
Guías para cuerda |
El ahoyador lo empleo para, como su nombre indica, hacer agujeros en el bancal en el lugar donde depositar semillas o plantas. En mi canal de Youtube podreis ver como lo utilizo para plantar tomateras.
Ahoyador |
El escantillón es una guía para colocar las plantas a una determinada distancia. La cuerda nos indica la línea que deben seguir, y el escantillón a la distancia que las separaremos. Yo lo he hecho a partir de una madera cuadrada (2x2 cm) de 1 metro de longitud. En cada cara he marcado diferentes distancias, las más usuales que yo utilizo: cada 15 cm, cada 20 cm, cada 25 cm y cada 35 cm.
Escantillón |
El cubo es muy versátil, desde usarlo para regar, aplicar purín, depositar las piedras que voy quitando, transportar la cosecha,... No puede faltar.
Cubo |
El escarificador de mano me sirve para eliminar las malas hierbas que a veces son tan frecuentes en los bancales, incluso con el acolchado. Rascando un poco la tierra alrededor de la mala hierba consigo sacarla con la raíz. Así tengo una planta menos, ya que si dejamos la raíz será capaz de rebrotar fácilmente y volveremos con el problema en poco tiempo.
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